Cupcakes de té verde matcha

No sé si os ha pasado pero yo, de repente, oigo "té matcha" por todas partes. No lo había oído en mi vida, pero de la noche a la mañana no hago otra cosa que ver recetas por la blogosfera con este ingrediente que parece haber salido de la nada...

Es el té verde más puro que hay. Yo lo compré en las tiendas Tea Shop, en las que venden una bolsita hermética de té apto para repostería. Es caro, no os voy a engañar, ya que la bolsita me costó unos 23€. Eso sí, dura muchísimo ya que para esta receta sólo hay que usar una cucharadita.

Ingredientes

harina

200 g de azúcar

200 g de mantequilla

4 huevos

100 ml de leche

200 gr de harina self-raising (o harina con levadura)*

1 cucharadita de té verde Matcha

* es un tipo de harina que viene con levadura y sal incorporada. Yo la encontré en Carrefour, en el pasillo de comidas de otros países, pero también podéis hacerla casera de la siguiente forma: por cada taza de harina que necesitéis hay que añadir 1 cucharadita colmada de levadura en polvo y 1/2 cucharadita de sal. Mezclar bien y listo.

Batir mantequilla (que debe estar a temperatura ambiente) con el azúcar hasta que tenga textura cremosa (un par de minutos). 

Añadimos los huevos de uno en uno. No añadir el siguiente hasta que el primero se haya integrado del todo.

Echamos ahora la leche, poco a poco y batimos para que esta se integre.

Es curioso pero, al menos en mi caso, siempre que he hecho esta masa se me ha cortado en este punto. Si os pasa no os preocupéis ya que se arregla al echar la harina.

Incorporamos la harina con levadura junto al té matcha (tamizados). Batimos hasta que esté totalmente incorporada.

Rellenamos nuestras cápsulas 2/3 (a mi me gusta llenarlas casi hasta arriba para que queden gorditos, pero eso ya es a gusto de cada uno) y horneamos en horno precalentado a 180 grados durante 20 minutos.

Una vez horneados los dejaremos enfriar 10-15 minutos dentro del molde para cupcakes. Después los dejaremos enfriar del todo sobre una rejilla. Deben estar completamente fríos antes de decorarlos, ya que de lo contrario se nos derretiría el frosting.

Para la cobertura usé el frosting de queso crema (podéis ver la receta aquí). Debería empezar a probar nuevas coberturas ya que últimamente siempre uso la misma pero... es que está tan rica!...

Para decorarlos usé la boquilla 1M de Wilton.

Y eso es todo, ¡¡espero que os guste!!

Muffins de chocolate y plátano

Después de la combinación chocolate-menta, creo que la de chocolate-plátano es la que más me gusta. Y si encima es en forma de muffins pues... para que decir más!.

Son muy sencillitos de hacer, además no hace falta ni que tengas batidora ya que el truco para que los muffins nos salgan con montañita es precisamente no mezclar la masa en exceso.


Ingredientes


480 g de harina
1 cucharadita de levadura en polvo
1 cucharadita de bicarbonato
200 g de azúcar
2 plátanos grandes rallados o machacados
100 g de pepitas de chocolate
280 ml de leche
2 huevos
110 g de mantequilla derretida
1 pizca de sal

Tamizar la harina con la levadura, bicarbonato y sal.

Mezclar los huevos con el azúcar. Derretimos la mantequilla en el microondas, la dejamos atemperarse un rato y la añadimos junto con la leche a la mezcla anterior.

Incorporamos los plátanos y las pepitas de chocolate.

Por último echamos la harina, procurando no remover en exceso, es decir, cuando tengamos toda la harina incorporada no mezclaremos más la masa.

Rellenamos nuestros moldes casi hasta arriba y los horneamos (en horno precalentado) a 180 grados durante 20-25 min. Comprobaremos que están hechos introduciendo un palillo o varilla y comprobando que esta sale limpia.

(Si vuestras cápsulas no son rígidas recordar que tenéis que meterlas en un molde para cupcakes para que no se nos abran)

Dejadlos enfriar en una rejilla... si podéis, porque calentitos están de muerte!!

¡Qué los disfruteis!

Apple pie

Con este tipo de pasteles me siento como si estuviera dentro de una película de los años 50. Yo llevaría el pelo a lo Grease y me pondría un mandil rosa para servir los pasteles junto a grandes vasos de batidos...

Me encantan, no lo puedo evitar. Si, ya sé que se acabaron las navidades y que media humanidad está a dieta pero... son tan bonitos... que bien valen saltársela por un día! o no?

Tengo en mi lista de pendientes comprarme un libro de pies, pero mientras me decido o no, os dejo con esta receta, sacada de la página de Joy of baking, que me descubrió mi amigo Lalo.
En ella podéis ver también el video de cómo se hace, en inglés, eso sí... de todas formas os traslado aquí la receta en español :-)


Ingredientes (para la masa)


350 g de harina
1 cucharadita de sal
30 g de azúcar
225 g de mantequilla sin sal (fría y cortada en cuadraditos pequeños)
60 - 120 ml de agua helada

Ingredientes (para el relleno)


6 manzanas (yo mezclé 3 granny smith y 3 fuji)
50 g de azúcar
55 g de azúcar moreno
1 cucharada de zumo de limón
1 cucharadita de canela
1/4 cucharadita de sal
30 g de mantequilla sin sal
15 g de maicena (harina de maiz)

Estas cantidades son para un molde de 23 cm.


Para la masa: mezclar harina, sal y azúcar. Añadir la mantequilla en cubitos de unos 3 cm y meclar nuevamente. Se nos quedará una especie de migas. Es el momento de echar un poquito de agua helada y volver a mezclar. Tenemos que repetir este paso hasta que al juntar con las manos nuestras "migas" estas se queden pegadas formando una masa compacta.

Una vez que tengamos esto, volcamos nuestra masa a la mesa de trabajo. Formamos una bola que partimos en dos. Aplanamos cada parte formando dos discos, guardamos cada uno bien envueltos con papel film en la nevera al menos una hora antes de usarla.

Para el relleno: Pelamos las manzanas, las cortamos por la mitad y estas a su vez en nuevas mitades y estas en gajos de unos dos cm. El corazón lo desechamos.

Ponemos todos los gajos en un bol, al que añadimos el limón, la canela, la sal y los azúcares. Mezclamos bien y dejamos reposar a temperatura ambiente entre media hora y tres horas. Pasado este tiempo veremos que ha soltado mucho jugo. Ponemos las manzanas a escurrir otra media hora, hasta que consigamos unos 120 ml de este jugo (más o menos).

Cuando lo tengamos  pondremos este jugo en un bol apto para microondas junto a 30 g de mantequilla. Lo calentaremos durante 5-7 minutos, para que hierva y caramelice.

Mezclamos las manzanas con la maicena y después con el caramelo que acabamos de hacer.

Mientras, habremos sacado una de las partes de masa, y la habremos amasado y habremos cubierto con ella un molde de pie.

Volcamos las manzanas en el molde, repartimos bien y tapamos con la otra parte de masa, uniendo bien los extremos de ambas partes para que no se salga nada. Podemos darle la típica forma ondulada de los pies con los dedos o darle forma con un tenedor, o dejarlo liso, como queráis.

Con ayuda de un cuchillo afilado hacemos cinco cortes en la superficie a modo de "respiradero".

Hornear en la parte baja del horno (precalentado) a 200 grados durante 45-55 minutos.

Para que los bordes no se tuesten demasiado podéis haceros un aro de papel de aluminio que cubran estos y colocarlo a la media hora de horneado sobre el pie.

Una vez horneado dejar enfriar sobre una rejilla. Aconsejan aguantar la tentación y no comerlo antes de 3 o 4 horas, nos aseguran que estará más rico pero... con el olor que sale del horno ¿quién puede resistirse?

Con vuestro permiso voy a por otro trozo!!

Hasta pronto!

Tiramisú

Antes de nada perdón por la escasez de fotos pero, para que negarlo, no me ha quedado muy fotogénico que digamos... no le dio tiempo a enfriarse bien y está demasiado blando... pero como de sabor está impresionante, lo he querido poner para que tengáis la receta, así que no lo miréis mucho jeje.

Aunque mucha gente lo hace con bizcochos de soletilla, lo cierto es que el auténtico tiramisú italiano se hace con unos bizcochos llamados "savoiardi".

En Madrid los encontré en una tienda de productos italianos. Pero si no los conseguís ya os digo que los soletilla es lo que más se les parece.


Ingredientes


200 g de azúcar
4 huevos
café para 6 personas aprox.
1 chorrito de ron
25 bizcochos savoiardi
500 g de queso mascarpone
cacao sin azúcar

Hacer café bastante fuerte y cargado como para 6 personas. Echar un chorrito de ron y dejar enfríar.

Separar las yemas de las claras. Montar estas a punto de nieve fuerte.

Mezclar las yemas con el azúcar. Ir echando el mascarpone poco a poco a la mezcla (el queso es mejor haberlo sacado media hora antes de la nevera). Mezclar bien.

Añadir a esta crema las claras con movimientos envolventes para que no se bajen.

Mojar los bizcochos sólo vuelta y vuelta y disponerlos en la fuente de preparación. Es importante que estén sólo medio segundo por cada lado ya que absorben el café muy rápidamente.

Una vez que tengamos la primera capa de bizcochos, continuar con una capa de crema y así sucesivamente.

Cubrir con cacao en polvo.

Meter en la nevera al menos un par de horas antes de comer.



¡¡Espero que os guste!!

¡¡¡Aprovecho para desearos un muy feliz 2012 lleno de recetitas!!!!

Roscón de reyes

Si tuviera que elegir el recuerdo más feliz de mi infancia sin duda estaría vinculado a la noche de reyes. Ver la cabalgata deseando volver a casa para meterme en la cama y dormirme pronto para que amaneciera lo más pronto posible, llena de nervios... ains... espero poder inculcarle algún día a mis hijos la ilusión que supieron transmitirme mis padres, es una pena que de mayor esto se vaya perdiendo... menos mal que nos queda el roscón, que las penas con roscón son menos!!  :-)

Esta receta es de la archiconocida Isasaweis. Está riquísimo, nada que envidiar a los que venden en las tiendas y es muy fácil de preparar.

Ingredientes

450 g harina fuerza

100 g azúcar

100 ml leche

75 g mantequilla

1 sobre levadura panaderia

miel

15 ml agua de azahar

35 ml zumo de naranja

2 huevos

ralladura de media naranja

naranja y almendra para decorar

Mezclar la leche, el zumo y el agua de azahar a temperatura ambiente. Agregar los huevos batidos, un buen chorro de miel, el azúcar, la ralladura y la mantequilla derretida en el microondas. Mezclar bien.

Agregar la harina y la levadura. Mezclar y dejar reposar al menos durante 2 horas y media en un sitio templado.

Cortar rodajitas de naranja muy finas y cubrir con azúcar. Esto nos servirá para decorar. Reservar.

Espolvorear la mesa de trabajo con harina y volcar la masa. Trabajarla durante 5 minutos dándole forma de bola.

Cubrir la bandeja de horno con papel vegetal y, con las manos engrasadas en aceite, colocar la masa en ella dándole forma de roscón. Haced el agujero un poco más grande de lo normal ya que al levar la masa este menguará y se cerrará.

Pintar la superficie con huevo batido, decorar con la naranja y almendra en cubitos, espolvorear con el azúcar que tenía la naranja. (esto es una opción, pero podéis decorarlo como queráis (fruta confitada, guindas...).

Dejar reposar 3 ó 4 horas. Podéis hacerlo a última hora, dejarlo fermentar toda la noche y hornearlo por la mañana.

Se hornea a 180 grados con calor arriba y abajo durante 25 minutos o hasta que lo veais doradito.

¿habéis escrito la carta ya?

Lombarda con manzana

Estreno recetas de navidad con el Calendario de Adviento que organiza Noema del blog Intercultura y cocina!!

Pasaos por su blog y durante todo el mes de diciembre podréis ver una entrada nueva cada día. Gracias Noema!

¡¡Y tras el día 15 nos escondemos mi lombarda y yo!!

En Madrid es muy típico tomarla para cenar el día de Nochebuena, seguida de un buen corderito o merluza.

Ingredientes (para 4 personas)

1 lombarda de 1 kg

1 manzana 

4 ajos

1 chorrito de vinagre de manzana

1 chorrito de vino de jerez

1 cucharadita de azúcar moreno

Partir la lombarda por la mitad, después cada mitad en cuartos y así hasta tener trocitos pequeñitos. Cocer en olla express con un poquito de sal unos 10 minutos. Escurrir y reservar.

En una sartén con un chorrito de aceite echar los ajos laminados. Cuando estén dorados retirarlos y rehogar la lombarda en ese aceite. Pasados 5 minutos añadir la manzana troceada en cuadraditos, el vinagre, el vino y el azúcar. Dejar reducir a fuego medio otros 5-10 minutos.

Espero que os guste y... ¡¡Felices fiestas!!

Ruffle cake de chocolate y café

¡Qué ganas tenía de hacer un pastel así!. En cuanto lo ví, hace ya meses en algún blog norteamericano, fui corriendo a comprarme la boquilla, pero la verdad es que hasta hoy no había tenido tiempo. Es taaaan mono!!

Para esta tarta podéis hacer cualquier bizcocho que os guste con cualquier relleno y reconvertirlo en "ruffle" ya que esto hace referencia no a la receta sino a la forma de decorarlo (ruffle podría traducirse como "volante")

El mío en este caso es de chocolate con buttercream de café. Ambas recetas son del libro de la Primrose Bakery. Todas las recetas que saco de este libro son éxito asegurado, me encanta!


Ingredientes para el bizcocho


230 g de chocolate negro (70% de cacao)
170 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
230 g de azúcar
120 g de azúcar moreno
3 huevos tamaño L
370 g de harina tamizada
1 y 1/2 cucharadita de levadura en polvo
1 y 1/2 cucharadita bicarbonato
1/2 cucharadita de sal
500 ml de leche semi desnatada a temperatura ambiente
2 cucharaditas de extracto de vainilla


Ingredientes para el buttercream


150 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
1 cucharada de leche semi desnatada a temperatura ambiente
2 cucharadas de café instantáneo disuelto en una pequeña cantidad de agua caliente
350 g de azúcar glass tamizada



Derretir el chocolate, bien en microondas, bien al baño maría. Dejar que se enfríe.

Batir la matequilla con el azúcar durante 3-5 minutos. Separar las yemas de las claras. Batir las yemas unos minutos y agregarlo a la masa anterior.

Echar poco a poco el chocolate derretido y continuar batiendo.

Mezclar harina, levadura, bicarbonato y sal. Tamizar.

Unir el extracto de vainilla con la leche.

Añadir un tercio de la mezcla de harina a la masa, después la mitad de la leche. Continuar con otro tercio de harina, el resto de leche y finalizar con el último tercio de harina.

Montar las claras a punto de nieve e incorporarlas a la masa con movimientos envolventes con cuidado para no bajarlas.

Hornear durante 25-30 min a 190 grados en horno precalentado.


A mi con estas cantidades me ha dado para hacer 4 bizcochos de 18 cm de diámetro.

Para hacer el buttercream mezclar la mantequilla, con la mezcla de café, la leche y la mitad del azúcar tamizado. Batir bien. Añadir el resto del azúcar y terminar de batir hasta conseguir la consistencia deseada.

Para hacer los "volantitos" hay que cubrir previamente la tarta con una capa fina de buttercream. Después rellenar una manga pastelera con una boquilla de pétalos más bien grande. Yo he usado la 124 de Wilton. Hay que poner la manga pastelera muy vertical y con la parte fina de la boquilla hacia fuera.

En este vídeo podéis verlo perfectamente

¡¡Espero que lo pongáis en práctica y sorprendáis a vuestros invitados!!

Macarons de menta y chocolate

Siempre que los veo en algún escaparate me paro a mirarlos. Su forma es tan atractiva que es imposible resistirse a ellos, no creéis?

Había oído varias veces que su elaboración resultaba complicada, pero un par de consultas vuestras con varias dudas me animó a hacerlos, y... si, lo confirmo, son muy difíciles!!!!!

Al menos para mi, he seguido distintas recetas y sinceramente a cual peor... o me salen muy líquidos, o no sale el típico pie o se rompen. Con esto no quiero desanimaros para nada! al contrario, necesito que practiquéis vosotros también y entre todos luchemos contra el macaron rebelde!!! :-)

Los macarons se hacen con harina de almendra, algo dífícil de conseguir por aquí, así que la sustituimos por almendra molida, pero con la precaución de tamizarla dos, tres y hasta cuatro veces para lograr después una superficie lo más lisa posible.

Para mi una de las cosas más difíciles ha sido pillarle el punto a las claras. Hay que montarlas a punto de nieve, si las montas muy firmes al hacer los macarons después con la manga pastelera nos quedará un piquito arriba que no se deshará y si las dejamos muy líquidas se nos juntarán unos con otros perdiendo la forma. Lo mejor, una vez que tengamos la masa, es hacer una prueba en un plato, echamos una cucharada de masa, si la vemos muy firme removemos un poquito más hasta que tenga la consistencia que queremos, es decir, que forme un círculo sin que se desparrame pero que al hacerle un pico este se funda a los 5-10 segundos.

También he leído en varios sitios que es aconsejable dejar "envejecer" las claras. Esto significa que una vez separadas de las yemas hay que dejarlas 48 horas metidas en la nevera en un bote hermético.

Tras hacer varias pruebas variando tiempo y temperatura esta es la receta con la que "más o menos" me salen medio decentes...

Ingredientes


200 g de azúcar glass
100 g de almendras molidas
3 claras de huevo
una pizca de sal
dos cucharadas de azúcar

Mezclar el azúcar glass con las almendras. Tamizar varias veces (esto es muy importante para no obtener una superficie rugosa que afearán nuestros macarons).

Montar las claras a punto de nieve con una pizca de sal, cuando estén casi montadas y sin dejar de batir añadir dos cucharadas de azúcar blanquilla. También es el momento de echar colorante si queremos. En este caso yo los hice verdes.

Cuando las tengamos montadas y creamos que es el punto de nieve correcto (para mi lo más difícil) ponemos las claras en un bol y vamos incorporando poco a poco la mezcla del azúcar y almendra, realizando movimientos envolventes para que no se nos bajen las claras.

Colocar un papel vegetal en la placa del horno. Para que te salgan todos del mismo tamaño podemos dibujar círculos que nos sirvan de guía. Yo usé el tapón de la crema de manos :-)

Echamos la masa en una manga pastelera. Con una boquilla redonda más o menos grande (o directamente con el adaptador de boquillas) hacemos círculos del mismo tamaño (de unos 5 cm).

Hay que dejar reposar los macarons aproximadamente una hora. Esto es muy importante para que se sequen por fuera y formen el pie tan típico. Pasado este tiempo, si los tocamos, no deberían estar pegajosos sino más bien sequitos.

Hornear en horno precalentado a 160 grados durante 8 minutos.

Este es el tiempo que me funciona a mi en mi horno tras hacer muchas pruebas. Si lo dejo más tiempo o se rompe la superficie o se doran perdiendo color. Pero os aconsejo que hagáis alguna prueba con un par de macaron antes de meter la bandeja entera para ver como reacciona vuestro horno.

Relleno

25 g de hojas de menta

40 g de azúcar

150 g de chocolate negro

Hacer infusión con las hojas de menta, el azúcar y el agua dejándolo reposar como mínimo una hora (cuanto más tiempo lo dejéis más sabor a menta tendrá).

Pasado este tiempo volver a hervir la infusión, colarla y añadir el chocolate troceado. Remover hasta conseguir una crema sin grumos. Dejar enfríar hasta que haya espesado lo suficiente como para rellenar los macarons.

Espero haberos resuelto algunas dudas y os animo a que probéis y me lo contéis!!!!

Bundt cake de limón

¡¡Feliz día del bundt cake!!

Si, si, aunque no os lo creáis este bizcochito tiene un día y todo!! y es hoy, 15 de noviembre.

Obviamente es en EEUU, pero en España cada vez gana más fans, sobre todo por sus maravillosos moldes!

Después del de chocolate hoy le toca el turno al de limón. A la media hora de salir del horno sólo quedaba la mitad, así que os podéis hacer una idea de lo rico que está!


Ingredientes


250 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
250 g de azúcar
la ralladura de la cáscara de 1 limón
zumo de 1 limón
4 huevos L a temperatura ambiente
250 g de harina tamizada
2 cucharaditas de levadura en polvo
pizca de sal
60 ml de buttermilk*
1 cucharadita de extracto de vainilla

* para hacer el buttermilk casero basta con añadir unas gotitas de limón a 60 ml de leche, remover y dejar 10 minutos hasta que tenga un aspecto cortado.

Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente.

Batir la mantequilla un par de minutos. Añadir el azúcar y batir la mezcla 2-3 minutos (batidora eléctrica) hasta que tenga un aspecto esponjoso.

Incorporar los huevos de uno a uno. No añadir el siguiente hasta que el primero se haya disuelto por completo.

Echar ahora la ralladura de limón.

Añadir un tercio de la harina con la levadura. Después la mitad del buttermilk con el zumo de limón y la vainilla. Incorporar otro tercio de harina, el resto de los líquidos para terminar con el último tercio de harina.

Engrasar un molde, echar la mezcla en él y hornear (en horno precalentado) a 180 grados durante 45 minutos, o hasta que al introducir un palillo este salga limpio.

Dejar enfriar durante 10 minutos en el molde, pasado este tiempo desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla.

Con vuestro permiso me voy a la cocina a por otro trocito antes de que se acabe...

Qué lo disfrutéis y ¡¡Feliz día del bundt cake!!

Cupcakes de calabaza

Tras publicar la mesa de Halloween algunos de vosotros me habéis preguntado por la receta de los cupcakes de calabaza.

La saqué del libro de la famosa Primrose Bakery. Es la primera receta que hago desde que me compré el libro y como todos estén igual de buenos.... mmmmm!!

Ingredientes


110 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
240 g de azúcar "soft light brown sugar" *
2 huevos tamaño L
1/2 cucharadita de extracto de vainilla
100 g de puré de calabaza
125 g de harina "self-raising" o "leudante" **
120 g de harina normal
1/2 cucharadita de canela en polvo
1/2 cucharadita de jengibre en polvo
125 ml de buttermilk ***

* si no la encontráis usad 160 g de azúcar blanquilla + 80 g de azúcar moreno.

** es un tipo de harina que viene con levadura y sal incorporada. Yo la encontré en Carrefour, en el pasillo de comidas de otros países, pero también podéis hacerla casera de la siguiente forma: por cada taza de harina que necesitéis hay que añadir 1 cucharadita colmada de levadura en polvo y 1/2 cucharadita de sal. Mezclar bien y listo.

*** para hacerlo en casa basta con añadir una cucharada de zumo de limón a 120 ml de leche. Pasados 10 minutos tendrá un aspecto como de leche cortada, es normal, estará listo para usar!


Para el frosting o cobertura


175 g de queso crema tipo Philadelphia
450 g de azúcar glass (para mi gusto queda demasiado dulce, yo le eché sólo 400 g)
125 g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
una pizca de canela y clavo en polvo (opcional, yo la prefiero sin especias)

Mezclar la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla esponjosa (unos 3 minutos con batidora eléctrica).

Añadir los huevos de uno en uno. No echar el segundo hasta que el primero se haya incorporado a la masa completamente.

Incorporar el puré de calabaza. Yo lo compro en bote en Taste of America pero también podéis hacerlo en casa: podéis hervir la calabaza al vapor o asarla. Después triturarla y dejarla escurrir sobre un colador varias horas hasta que pierda el agua por completo.

En un bol aparte, mezclar los dos tipos de harina, la canela y el jengibre. Tamizar todo bien.

Añade un tercio de las harinas a la masa. Mezclar bien. Ahora incorpora la mitad del buttermilk. Una vez mezclado continuar con otro tercio de las harinas, después la otra mitad del buttermilk para acabar con el último tercio de las harinas.

Rellena con la mezcla cápsulas para cupcakes, llenándolas hasta 2/3 de su capacidad y hornear en horno precalentado a 180 grados durante 20-25 minutos o hasta que introduzcáis un palillo y este salga seco.

Si usáis un molde con cavidades para cupcakes dejar estos 10 minutos enfriar en el molde y después pasarlos a una rejilla. Con esto evitareis que el papel se despegue del cupcake.

Una vez fríos decorar con el frosting. Para hacerlo mezclar todos los ingredientes y batir durante unos 3 minutos (con batidora eléctrica).

Los cupcakes nunca se meten en la nevera, a excepción de estos debido al queso crema.

¡¡Espero que os gusten!!